El uso de drones es y será un complemento necesario para el sector de la seguridad privada, ya que es una tecnología eficaz para estudios perimetrales de áreas exteriores grandes y para establecer estrategias de prevención de incidentes a través de la detección de zonas críticas.
Para la policía y las fuerzas militares, el uso de drones a nivel mundial es algo indispensable para garantizar la seguridad de los ciudadanos a través de vigilancia y control de grandes grupos de personas en eventos masivos (con sensores de anomalías y cámaras de alta definición), operaciones antiterroristas, búsquedas y rescates(con cámaras térmicas para detectar presencia de personas ocultas y altavoz para hablarle a las víctimas), entre otros.
También para la seguridad privada hay diferentes tipos de usos:
Drones escoltas: Desde el aire las personas que así lo requieran podrán ser protegidos por drones como complemento adicional a toda la operación de protección. A través de los drones, se puede tener una visión más amplia del recorrido de las personas.
Vigilancia Perimetral: Funciona igual que un sistema de videovigilancia pero a menor costo para controlar perímetros de áreas amplias y sin puntos ciegos.
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Vigilancia dirigida: Pueden funcionar como la visión desde el aire de un guarda de seguridad pero de forma remota, para atender un incidente de seguridad de forma más rápida, revisión y vista previa de terrenos exteriores amplios y verificaciones a distancia.
Investigación y prevención de incendios: para mapear las áreas afectadas y además poder ver desde arriba hacia adonde se dirige el incendio y poder así generar alarmas para evacuación de personas aledañas.