Cada vez es más evidente que todas las grandes y medianas empresas enfrentan altos riesgos de seguridad debido a la variedad y complejidad de activos, sistemas informáticos y todo los que se requieren para su funcionamiento y operación diarios.
Ya no es suficiente contar con un plan de seguridad básico. Es necesario incluir dentro de la operación de seguridad temas de seguridad electrónica y análisis de la información para poder predecir, prevenir y reaccionar de forma acertada y basados en realidades y no suposiciones.
Empecemos entonces por definir qué es la seguridad electrónica?
Es la integración de las tecnologías de la información y la comunicación TIC con los procesos y servicios de seguridad física. Algunos ejemplos de sistemas de seguridad electrónica son:
- Controles de acceso
- CCTV
- Cámaras de videovigilancia
- Alarmas
- RFID
- Seguridad Perimetral
- Detección de Incendios
- Telemetría
- IOT
- Video analitica
- GPS
Estos son los más básicos, pero en los últimos dos o tres años la innovación en seguridad electrónica ha sido enorme ofreciendo a las empresas un abanico de opciones que se integra de manera funcional y eficiente con el operativo de seguridad física para aportar a la reducción de riesgos.
Por ejemplo, a través de la video vigilancia que es el análisis de las imágenes captadas en las cámaras de CCTV las cuales están conectadas a monitores de video, son muy útiles para monitorear la seguridad de centros comerciales, universidades y áreas residenciales con perímetros grandes.
Con un sistema de control de acceso, se pueden restringir accesos a diferentes áreas criticas de una instalación, controlar la entrada y salida de personas y activos, creación de bases de datos de empleados y visitantes. Hoy en día estos controles de acceso pueden ser de reconocimiento facial y tarjetas digitales para evitar el contacto.
Las empresas que cuentan con un sistema de detección de incendios podrán evitar pérdidas materiales y humanas ya que estos sistemas tienen sensores y accesorios que monitorean el sistema para poder reaccionar, evacuar y extinguir el incendio.