El sector residencial se está viendo afectado y amenazado por una variedad inmensa de bandas de delincuentes que tienen esta actividad delictiva como oficio y manera de ganarse la vida.
Para nadie es noticia que los robos a viviendas en Bogotá y en el país en general, han aumentado desde el 2017 hasta la fecha (3800 casos al cierre del año pasado). El sector residencial se está viendo afectado y amenazado por una variedad inmensa de bandas de delincuentes que tienen esta actividad delictiva como oficio y manera de ganarse la vida, agrediendo no solo los activos de otras personas sino también en muchos casos la integridad física de las mismas y a veces hasta están dispuestos a matar para lograr lo que quieren.
Leer también: Así cerro la seguridad en Colombia en 2017
Lo que si es claro es que los hurtos y robos en el sector residencial no van a parar o disminuir por el momento, debido a la ola de inseguridad que se vive en muchas ciudades de Colombia y a la falta de acción judicial contra la delincuencia común en Colombia. Estos asaltantes, aunque sean capturados, son liberados a los 30 o 60 días y proceden a seguir con su oficio de ladrones y hasta asesinos. Leer : Historias alarmantes de atracos en viviendas y negocios en Bogotá
Entonces, es momento de hacer una pausa y evaluar las medidas de seguridad que su vivienda o conjunto residencial tienen y además tener claro que no solo es necesario reforzar la seguridad en temporada de vacaciones, sino que debe ser un tema permanente pues al fin y al cabo es la protección de su familia la que está en juego.
¿Lo primero que hay que cuestionarse es si es suficiente con tener seguridad física? (guardas de seguridad), verificar si la empresa de seguridad que se tiene contratada ofrece herramientas tecnológicas que complementen y aporten al trabajo del guarda de seguridad.
La seguridad ha logrado una fusión completa con la tecnología, la cual aporta unas herramientas fundamentales para desarrollar y ejecutar una estrategia de seguridad óptima y viable. Las cámaras de seguridad, alarmas, botones de pánico y sistemas de monitoreo; se han convertido en el mejor equipo para complementar todo un andamiaje que busca brindar la seguridad de cualquier residente. Cabe resaltar, que quizás no todas las herramientas sean necesarias para una zona residencial; por eso es de gran importancia ejecutar un estudio riguroso que estipule y aclare las verdaderas falencias de seguridad que sufre una comunidad.
El aspecto del precio que se paga a las empresas de seguridad siempre es un dilema que discutir en las asambleas de conjuntos y edificios y lo que hay que hacerles ver es que la seguridad no es un gasto, Es una inversión.